EL SOL Y LA ALIMENTACIÓN II

By: | Tags: | Comments: 0 | abril 1st, 2015

En el artículo anterior vimos cómo betacarotenos, vitamina C, vitamina E, ácidos grasos omega 3, agua y azufre, son sustancias que protegen y preparan la piel para evitar los efectos perjudiciales del sol. También comentamos los alimentos ricos en carotenoides.
Hoy hablaremos de la vitamina C o ácido ascórbico, vitamina hidrosoluble con un alto poder antioxidante. Se considera “esencial” ya que no puede ser sintetizada por los seres humanos. La vitamina C ayuda a la formación del colágeno, hormonas y neurotransmisores como la dopamina y la noradrenalina. Frente a la radiación solar, favorece la eliminación de los radicales libres generados por la exposición al sol y previene o retrasa el fotoenvejecimiento.
El ácido ascórbico está muy extendido en la naturaleza. En general, todas las frutas y verduras lo contienen en mayor o menor cantidad y es escaso su contenido en los cereales. Las frutas con mayor contenido son las ácidas: kiwi, fresas, grosellas, mango, pomelo y naranja. Vegetales ricos en ella son las hojas frescas, el perejil, pimientos, coliflor y berros.
Entre los alimentos de origen animal, la vitamina C es escasa aunque se encuentra en cierta cantidad en hígado, riñón y cerebro (alimentos no recomendados por otra parte por su alto contenido en grasas saturadas).
Por otra parte, se ha demostrado que la vitamina C mantiene los niveles de las vitaminas A y E a nivel celular, disminuyendo el estrés oxidativo. Arrugas prematuras y quemaduras solares pueden minimizarse aumentando la suplementación de estos alimentos en la dieta antes de tomar el sol.
DESAYUNO RICO EN VITAMINA C “que también ofrece saciedad y sabor”:

  • Un vaso de leche desnatada.
  • 50 g de pan integral con aceite de oliva más ½ tomate más una cucharadita de perejil.
  • Un vaso (unos 200 ml) de zumo de naranja y pomelo. El zumo se puede sustituir por 150 g de fresas o 2 kiwis.