LAVADO CORRECTO DE MANOS: GRANDES BENEFICIOS CON UN HÁBITO SENCILLO

By: | Tags: | Comments: 0 | octubre 9th, 2017

EL HÁBITO DE LAVARSE LAS MANOS CON FRECUENCIA

El hábito frecuente de un correcto lavado de manos, nos ayuda a protegernos de hasta 200 enfermedades y disminuye el riesgo de desarrollar resistencia a los antibióticos. Algunas enfermedades que se pueden prevenir son las infecciones respiratorias, como la gripe común o gripe A, neumonía, tosferina y bronquiolitis; patologías de transmisión feco-oral, como el cólera, diarrea y hepatitis A y E, así como la gastroenteritis, gastritis, neumococo, enfermedad mano-pie-boca o lombrices intestinales. En definitiva, el lavado de manos frecuente es la medida preventiva más eficaz y barata para la prevención de infecciones entre personas que están en contacto.
De hecho, según datos de UNICEF, en 2015 más de 300.000 niños menores de cinco años murieron en todo el mundo por enfermedades diarreicas ligadas a la falta de agua potable y saneamiento. Además, diversos estudios han mostrado que el lavado de manos con jabón después de ir al baño y antes de comer puede reducir la incidencia de enfermedades diarreicas en un 40% o en un 25% la tasa de contagio de neumonía entre los menores.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y diversas entidades y profesionales sanitarios aseguran que un lavado frecuente y correcto de las manos, ayuda a disminuir la creciente resistencia a estos fármacos.
Como indican la OMS, UNICEF, y muchas otras organizaciones, LAVARSE LAS MANOS SALVA VIDAS: «Una de las formas más eficaces de salvar las vidas de los niños es simplemente que se laven las manos con jabón» (Sasnjay Wijesekera, jefe mundial de los programas de Agua, Saneamiento e Higiene de UNICEF).

CÓMO Y CUÁNDO LAVARSE LAS MANOS

Con el objetivo de adoptar este hábito, desde la Asociación Manos limpias han recordado la importancia de lavarse con agua y jabón al preparar los alimentos o manipularlos, después de tocar tierra o alimentos, tras usar el inodoro o cambiar pañales, antes de tocar a un bebé o si se está en contacto con ancianos o enfermos, así como después de estornudar o toser.
También es aconsejable hacer un buen lavado de manos al legar a casa, tras viajar en transporte público o después de estar en espacios cerrados y con mucha gente. Sin embargo, para que el lavado de manos sea eficaz hay que tomarse el tiempo adecuado, unos 40 o 60 segundos en total, sin minimizar u olvidar ninguna de las cinco fases:
  1. Mojado de manos
  2. Enjabonado
  3. Frotado
  4. Aclarado
  5. Secado
Así, un correcto lavado de manos implica siempre la utilización de agua a cualquier temperatura y de jabón o gel, así como el frotado «a conciencia» de ambos lados de las manos, dedos, espacio entre los dedos y debajo de las uñas durante unos 40-60 segundos, procediendo posteriormente al aclarado completo que arrastre toda la suciedad.
En cuanto al secado, en el ámbito doméstico puede realizarse con una toalla de tela, la cual se debe cambiar con frecuencia en función del uso y de las personas que la utilicen. Cuando hay enfermos, las toallas deberán ser individuales, así como en el caso de los niños pequeños o ancianos.
Finalmente, en el ámbito público, el secado de manos debe hacerse por ventilación o toalla de papel. El gel hidroalcohólico u otros sistemas, como las toallitas con solución jabonosa, son una lternativa cuando no hay acceso a jabón, agua o lavabos.

FUENTES

  1. http://www.who.int/gpsc/5may/es/
  2. https://www.unicef.es/noticia/dia-mundial-del-lavado-de-manos-0
  3. https://manoslimpias.es/
  4. https://www.responsabilidadsociosanitaria.com/secciones/salud-sociedad/la-oms-advierte-de-la-importancia-de-la-higiene-de-manos-para-resistir-contra-la-resistencia-a-los-antibioticos-8120
  5. file:///C:/Users/Usuario/AppData/Local/Microsoft/Windows/INetCache/IE/1N3G608M/Dialnet-ElImpactoActualDelLavadoDeManos-2574582.pdf